El presidente Rafael Correa estuvo visiblemente enojado al finalizar su recorrido en bicicleta desde el puente Guayaquil-Santay y llegar al nuevo paso peatonal Durán-Santay, que lo inauguró al mediodía de ayer.

Y ese enojo lo expuso durante el acto inaugural, que se dio en el malecón de Durán. Allí arremetió contra la constructora. Dijo que se la multará por incumplir la segunda prórroga concedida para finalizar los trabajos, aunque ni él ni el gobernador Rolando Panchana detallaron las labores que estaban pendientes en la apertura del paso peatonal de 678 metros.

Correa señaló que analizará el contrato, adjudicado a la empresa Bueno y Castro, para determinar si cabría la sanción y que si no, se dejaría en claro que aquella fue una compañía incumplida con el Gobierno.

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Además del puente, los trabajos incluían una caminera de 4,5 kilómetros de longitud al interior de la isla. El lunes pasado, a un día de la inauguración, faltaban instalar barandas en el sendero en un tramo de alrededor de 800 metros. La mañana de ayer no se completó esa tarea y en ese tramo se colocaron cintas plásticas de seguridad.

Correa llegó al sitio a las 11:00, en bicicleta, secundado por Panchana y la vicepresidenta de la Asamblea, Marcela Aguiñaga, y demás funcionarios. Venían de recorrer el sendero inconcluso de la Santay.

En su intervención en el acto, Panchana dijo que se autoimponía una multa del 20 % de su sueldo por “detalles que no estuvieron bien hechos” y que ponía a disposición su cargo.

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Luego intervino Correa. Habló de la posible multa a la constructora. Contó que la obra debía estar lista en diciembre pasado, que luego se la prometieron para julio y que posteriormente la fecha fue septiembre 15. Criticó al dueño de la constructora por encontrarse -según afirmó- en Miami.

“Metieron centenas de obreros a ver si lo podían terminar; no lo lograron (...). Cuidado no me dejan pasar a la gente; así sigan trabajando, pero hoy está abierto este puente”, expresó.

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Agregó que se construirá un parqueadero anexo al puente porque ya se había expropiado un terreno adjunto. Señaló que se analiza la construcción de un malecón de Durán “al estilo de la revolución ciudadana, no de cemento sobre el río”.

Con esa acotación encauzó sus críticas al alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot. Se refirió a la discrepancia por la construcción de puentes carrozables para descongestionar el tráfico en el puerto principal.

Nebot, junto con sus pares, José Yúnez, de Samborondón, y Pedro Salazar, de Daule, planea construir dos puentes. El Gobierno también propone dos viaductos, pero en un sitio algo distante al de los cabildos.

Correa remarcó que entregaron los estudios a los alcaldes y que prometió costear la diferencia económica.

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Nebot ha declarado que los municipios harán sus puentes y que el Gobierno debería cumplir con los suyos.

Correa, tras descalificar al alcalde guayaquileño, dijo que mejor iba a construir un puente para Durán. Propuso la ruta Peñón del Río-isla Mocolí-La Puntilla-Parque Samanes. “Ciudades como Durán que tienen un solo puente (...), que tienen más población de Daule y Samborondón juntos....”, fustigó y aludió a una supuesta intención de “proteger islas privadas”.

A los duraneños les prometió pronto solucionar el problema del agua potable. Dijo que con una alcaldesa del oficialismo (Alexandra Arce) se facilitaba la respuesta. Criticó también al exalcalde Dalton Narváez (coideario de Nebot) por el cambio del eje del puente a la isla Santay. Dijo que desplazar unos metros la obra, para minimizar el impacto al malecón de la Abel Gilbert, costó $ 700.000.

$ 20 millones fue el costo aproximado del puente y camineras

Mascotas pueden ir a isla
El presidente Rafael Correa levantó ayer la prohibición de ingreso de mascotas a la isla Santay, pero llamó a los dueños de los animales a no descuidarlos, en alusión a sus deposiciones.